Un hombre irrumpuió el sábado en un centro de distribución de California y empezó a disparar a la gente, matando a un empleado e hiriendo a otros cuatro antes de morir baleado por la policía, según las autoridades.
El hombre de 31 años inició el ataque con un rifle semiautomático en torno a las 15:30 en un centro de distribución de Walmart al sur de Red Bluff, en el condado de Tehama, según explicó en una conferencia de prensa el jefe asistente de la policía del condado, Phil Johnston.
El agresor dio cuatro vueltas al estacionamiento del lugar antes de estrellarse contra el edifico y abrir fuego con el rifle, dijo Johnston.
Policías de Red Bluff abatieron al tirador en el lugar, según la televisora KHSL.
El sospechoso tenía una relación pasada con el centro de trabajo, indicó Johnston. La identidad del hombre no se publicó a la espera de notificar a sus allegados.
El empleado fallecido era Martin Haro-Lozano, de 45 años y procedente de Orland, California, dijo Johnston.
Los dos fallecidos y los cuatro heridos fueron trasladados al Hospital de la Comunidad St. Elizabeth en Red Bluff, informó la portavoz Allison Hendrickson a The Associated Press. Declinó brindar mayores detalles.
También se produjo un incendio en el centro de distribución, según las autoridades. Había unos 200 trabajadores en las instalaciones, algunos de los cuales se encerraron en un cuarto, dijeron trabajadores del lugar a la televisora KHSL TV.
Scott Thammakhanty, empleado en el centro de recepción del lugar, dijo haber escuchado los disparos de un arma semiautomática del agresor.
“Continuaba y continuaba, ni siquiera sé cuántas veces disparó”, señaló Thammakhanty. “Sólo sé que fueron muchas veces”.
Thammakhanty dijo al periódico que desconocía la identidad del sujeto.
Otro de los empleados, Franklin Lister, de 51 años, dijo al The New York Times, que acababa de entrar a trabajar cuando un compañero corría por un pasillo gritando: “¡Disparos! ¡Atacante activo disparando!”
Vince Krick dijo a Record-Searchlight que su esposa e hijo trabajan en el lugar. Resultaron ilesos, pero Krick esperaba en el centro de distribución para reunirse con ellos.
“Todo fue loco, porque, vean, uno no puede hacer nada”, declaró Krick. El hombre iba a recoger a su esposa cuando vio las llamas. Su esposa avisó por mensaje de texto que se encontraba bien, pero le dijo que no se dirigiera a la entrada principal, según el periódico.
Los encargados de las telecomunicaciones de emergencia dijeron al periódico Record-Searchlight que al menos una mujer fue baleada.
Redd Bluff es una ciudad de unos 14.000 habitantes a unos 210 kilómetros (131 millas) al norte de Sacramento, California.
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