El médico del presidente Donald Trump dijo el sábado que el presidente está bien.
“Esta mañana, el presidente está muy bien”, dijo el Dr. Sean Conley, el médico del presidente, en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed en Maryland el sábado.
“El equipo y yo estamos muy contentos con el progreso que ha hecho el presidente”.
Trump tuvo una leve tos, congestión nasal y fatiga, pero todos los síntomas se están “resolviendo y mejorando”, dijo Conley a los periodistas en una conferencia de prensa.
El Dr. Sean Dooley, un neumólogo de Walter Reed, dijo que Trump está recibiendo atención multidisciplinaria.
“Lo estamos monitoreando muy de cerca para detectar cualquier evidencia de complicaciones ya sea por la enfermedad del coronavirus o por las terapias que estamos prescribiendo para que mejore”, dijo Dooley.
Dooley dijo que Trump está “de muy buen humor” y dijo a los médicos, “Siento que podría salir caminando de aquí hoy”.
“El gran plan para hoy, ya que está de tan buen humor y le va bien, es animarle a comer, beber, mantenerse hidratado, levantarse de la cama, y trabajar y hacer las cosas que necesita para ponerse bien”, añadió Brian Garibald, otro médico de Walter Reed.
Trump, de 74 años, dio positivo el 1 de octubre, junto con la primera dama Melania Trump, de 50 años, tras el diagnóstico positivo de COVID-19 de la ayudante de la Casa Blanca Hope Hicks, de 31 años.
Walter Reed, el centro médico militar conjunto más grande del país, está a unas 15 millas al noroeste de la Casa Blanca.
COVID-19 es la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
Trump ha tomado una dosis del cóctel de anticuerpos policlonales de Regeneron, al menos una dosis de Remdesivir, y zinc, vitamina D, famotidina, melatonina y aspirina.
Los anticuerpos policlonales son una colección de anticuerpos producidos por diferentes células B. Los anticuerpos ayudan a proteger el cuerpo humano contra sustancias extrañas.
Regeneron, con sede en Nueva York, dijo esta semana que los datos iniciales de un ensayo clínico mostraron que el cóctel redujo la carga viral y el tiempo para aliviar los síntomas en los pacientes no hospitalizados con COVID-19.
A Trump también se le administró zinc, vitamina D, famotidina, melatonina y aspirina.
El zinc ha demostrado tener éxito en el tratamiento del COVID-19, en particular cuando se combina con la hidroxicloroquina antipalúdica y la azitromicina, un antibiótico. Las personas con deficiencia de vitamina D deberían tomarlo para protegerse contra el nuevo virus, dijo el Dr. Anthony Fauci el mes pasado, una recomendación respaldada por médicos y estudios.
La famotidina es un medicamento para la acidez estomacal. La melatonina se usa para regular los ciclos de sueño. La aspirina es un anticoagulante y antiinflamatorio.
Antes de la actualización del sábado, Conley había escrito tres memorándums sobre la salud del presidente y la primera dama.
Conley dijo el 1 de octubre que la pareja había dado positivo en la prueba del COVID-19. Ambos “están bien en este momento, y planean permanecer en casa dentro de la Casa Blanca durante su convalecencia”, escribió en el primer memorándum.
En una actualización al día siguiente, el doctor reveló los tratamientos que Trump había estado recibiendo. Dijo que Trump recibió una dosis del cóctel de anticuerpos policlonales de Regeneron.
Trump “permanece fatigado, pero de buen humor”, dijo el doctor, añadiendo que el resto de la familia Trump había dado negativo a COVID-19.
Conley dijo más tarde el viernes que recomendó trasladar al presidente a Walter Reed “para un mayor control”.
El médico dijo que Trump estaba “muy bien” y que no necesitaba oxígeno suplementario, pero que se le había dado una dosis de Remdesivir, un antiviral fabricado por Gilead Sciences, con sede en California.
Trump dijo en un video grabado en la Casa Blanca, “Creo que estoy muy bien, pero vamos a asegurarnos que las cosas funcionen”. Agradeció a sus seguidores por pensar en él.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, dijo que el presidente estuvo trabajando todo el viernes.
“Por precaución y por recomendación de su médico y expertos médicos, el presidente trabajará desde las oficinas presidenciales en Walter Reed durante los próximos días”, dijo en una declaración.
Trump habló por teléfono con un número de personas desde que fue diagnosticado, incluyendo líderes republicanos del Congreso.
El líder de la minoría de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy (R-Calif.) dijo a finales del viernes que había hablado con Trump.
“Se mostró optimista y me dijo que agradece todas las oraciones y el apoyo de todos”, dijo McCarthy en un tuit. “¡Nuestro presidente es fuerte y vencerá al virus!”
Varios republicanos importantes dieron positivo desde el diagnóstico de Trump, incluyendo el senador Ron Johnson (R-Wis.), el director de campaña de Trump Bill Stepien y el senador Mike Lee (R-Utah).
La primera dama permanece en la Casa Blanca, donde está descansando. La Casa Blanca dijo que tiene síntomas leves.
Los síntomas del COVID-19 incluyen fiebre, dolores y escalofríos.
Aunque COVID-19 puede ser una causa de muerte, la gran mayoría de los pacientes se recuperan, según datos de salud federales.
Un porcentaje significativo no muestra ningún síntoma o muestra síntomas leves. Otros requieren atención en hospitales.
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