Mike Pompeo anunció que promoverá el «acuerdo de paz» de EE.UU., así como de profundizar las relaciones de países árabes con Israel.
El secretario de Estado de Estados Unidos (EE.UU.), Mike Pompeo, arribó este lunes a Israel para impulsar la iniciativa «de paz» para esta región del Gobierno de Donald Trump, la cual incluye respaldar la intención de Tel Aviv de anexarse territorios palestinos ilegalmente ocupados.
Esta es la primera etapa de una gira de cinco días por esta área geográfica, donde también Pompeo visitaría Sudán, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Bahrein. El secretario de Estado de EE.UU. podría hacer escalas en otras naciones del Golfo Pérsico, según informó el Departamento de Estado.
Objetivos de la visita
Según EE.UU., uno de los objetivos de la visita es abordar la normalización de las relaciones entre Israel y EAU, a partir del acuerdo anunciado días atrás por ambas naciones. El periodista Itamar Eichner, especializado en temas políticos, ha advertido que durante esta gira también se tratará de presionar a otros países árabes para que sigan este ejemplo.
Días atrás, el embajador israelí en Washington, Ron Demer, declaró a la cadena Al Arabiya que “hay numerosos países que ofrecen posibilidades (para la paz). No quiero nombrar a ninguno en particular (…) pero esperamos avances muy, muy rápidos en las próximas semanas o meses”, refirió.
Sobre la visita a Sudán, Pompeo manifestó que su país «ayudará» en la «trasnsición política» que ocurre en ese país, así como que promoverá una “profundización en la relación Sudán-Israel”.
Consolidación de Netanyahu y Trump
El miembro del Buró Político del Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP), Hassan Abdel Hamid, y el negociador palestino Saeb Erekat señalaron que la visita de Pompeo no contribuirá al proceso de paz, sino que procura avanzar en la normalización de relaciones entre algunos países árabes e Israel «a expensas del pueblo palestino».
Ambos líderes expresaron que EE.UU. está presionando a las monarquías petroleras del Golfo a normalizar relaciones con Israel y renunciar a la petición de terminar con la ocupación de territorios palestinos, como sucedió recientemente con EAU.
Consideraron que esta visita trata de «reforzar la popularidad de Netanyahu”, afectada por la crisis interna y el rechazo internacional, y también «ayudar a Trump a ser reelegido presentando un importante logro diplomático en el Medio Oriente».
Cambio de política
Según medios internacionales, EAU ha asegurado que el acuerdo firmado con Israel supone “acabar con cualquier anexión suplementaria” de zonas de Cisjordania (intención rechazada por la comunidad internacinal), ocupada por Israel desde 1967. Sobre este aspecto, Netanyahu dijo que su país no ha renunciado a esta aspiración, sino que esta simplemente se había “aplazado”.
Para el profesor de la Universidad de Princeton, Richard Falk, este cambio de política procura dejar a los palestinos solos en su lucha por resistir la ocupación israelí y los planes de anexión.
Falk, quien fue relator especial de las Naciones Unidas sobre la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados, también manifestó que EE.UU. trata que los países árabes cambien su alianza contra Israel, lo conviertan en un socio con el apoyo de la Casa Blanca, y redirijan su alianza contra Irán.
Sin embargo, consideró que «este cambio geopolítico de un enfoque antiisraelí a uno antiiraní es frágil», pues no toma en cuenta «la continua solidaridad de los ciudadanos de los países árabes con la lucha palestina».
Be the first to comment