La Organización Mundial de la Salud propone una serie de medidas para abandonar gradualmente el confinamiento manteniendo la epidemia de COVID‑19 bajo control

Las medidas de salud pública adoptadas en muchos países frente a la pandemia de COVID-19, entre las que se incluyen el confinamiento global de la población, están causando una disrupción social y económica generalizada. Un nuevo documento de la Organización Mundial de la Salud (OMS) pretende guiar la respuesta a nivel nacional y local, ofreciendo orientaciones para iniciar una transición progresiva para relajar las restricciones a la vez que se mantiene la pandemia bajo control.

Contexto

Desde el inicio de la pandemia de la COVID-19, más de 1,7 millones de personas se han contagiado y alrededor de 85.000 han fallecido. La propagación global del virus ha colapsado los sistemas de salud y ha causado una disrupción social y económica generalizada. Las medidas de confinamiento adoptadas, con la consecuente suspensión de las actividades sociales y económicas, han logrado reducir la capacidad de transmisión comunitaria del virus.

Sin embargo, estas medidas generalizadas de distanciamiento físico de la población y de limitación de la movilidad pueden tener un profundo impacto negativo en los individuos, comunidades y la sociedad.

Se resume aquí un documento de la Organización Mundial de la Salud, , que pretende guiar la respuesta de salud pública frente a la COVID-19 a nivel nacional y local, ofreciendo orientaciones prácticas para la acción estratégica adaptadas al contexto local, destacando las orientaciones para los países que se preparan para la transición gradual desde una situación de transmisión generalizada a un estado estable de bajo nivel o sin transmisión.

Esta transición, según la OMS, debe basarse en la evidencia, apoyarse en datos y ser implementada gradualmente.

En un nuevo comentario publicado en Evidencias COVID-19, en el que se analiza este documento, se resumen lo seis criterios que propone la OMS para alcanzar este objetivo:

  1. Control de la transmisión de la COVID-19 y número de casos nuevos
  2. Cambio de orientación en la respuesta del sistema, de la identificación de casos graves a la detección y aislamiento de todos los casos (detección, realización de pruebas, aislamiento, cuarentena)
  3. Riesgo de brotes en entornos de alta vulnerabilidad
  4. Medidas preventivas en los puestos de trabajo
  5. Gestión del riesgo de casos importados
  6. Compromiso de toda la comunidad

Para reducir el riesgo de nuevos brotes, según la OMS, las medidas de restricción deben ser levantadas de forma escalonada y gradual, basándose en una evaluación de los riesgos epidemiológicos y de los beneficios socioeconómicos de levantar tales restricciones en diferentes lugares de trabajo, centros educativos y actividades sociales (como conciertos, eventos religiosos o deportivos).

Referencia:

[1] WHO Department of Communications Team. Strategic preparedness and response plan for the new coronavirus. April 14th 2020, disponible en https://www.who.int/publications-detail/covid-19-strategy-update-13-april-2020

Be the first to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo no será publicada.


*