La reanudación del crecimiento económico en América Latina no será suficiente para reparar las finanzas públicas en la región sin medidas fiscales estructurales, dice Fitch Ratings en un nuevo informe. Los desafíos fiscales explican la mayor parte de las perspectivas negativas en poco menos de la mitad de nuestras calificaciones soberanas de América Latina.
Fitch pronostica un crecimiento del PIB real regional del 4,6% en 2021 tras la contracción del 6,7% de 2020. Las perspectivas de recuperación se ven reforzadas por el repunte de China, el mayor estímulo estadounidense y el aumento de los precios de las materias primas. Nuestro último pronóstico del PIB para 2021 es más alto que nuestro pronóstico del 4.1% a principios de este año.
Junto con la retirada parcial del estímulo, esto debería respaldar cierta consolidación fiscal. Pronosticamos una reducción de los déficits este año en la mayoría de los soberanos latinoamericanos calificados por Fitch, aunque seguirán siendo altos en varios países.
Sin embargo, un resurgimiento de las infecciones por Covid-19 (y el distanciamiento social asociado) y los lentos lanzamientos de vacunación siguen siendo riesgos para el crecimiento y están presionando a algunos gobiernos para que extiendan las medidas de ayuda. Además, el débil punto de partida de la región y el importante deterioro fiscal durante la pandemia significan que estabilizar y eventualmente reducir la carga de la deuda pública requeriría medidas estructurales en lugar de solo mejoras cíclicas.
Por tanto, nuestro enfoque se desplazará hacia el análisis de los planes fiscales a medio plazo. Solo unos pocos gobiernos de América Latina han comenzado a detallarlos y, en el momento en que se perfilan, pueden enfrentar desafíos. Por ejemplo, las medidas fiscales de Brasil que se activan si el gasto obligatorio excede el 95% del gasto primario (no esperado a corto plazo) se diluyeron durante las deliberaciones del Congreso. Es probable que el Congreso modifique la próxima propuesta de reforma tributaria de Colombia. Las recientes protestas contra el gobierno amenazan la agenda de reformas de Paraguay, incluida su regla fiscal actualizada.
Es probable que las elecciones tengan implicaciones en la política fiscal a medida que los nuevos gobiernos enfrentan el desafío de controlar la pandemia y satisfacer las demandas sociales contra la consolidación de las cuentas fiscales. Algunos países, como Costa Rica, pueden enfrentar desafíos de implementación para cumplir con las metas de reforma fiscal y estructural acordadas con el FMI.
El informe, ‘Panorama general del crédito soberano latinoamericano 2T21’, está disponible en fitchratings.com o haciendo clic en el enlace de arriba.
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