Un recluso transgénero que se identifica como mujer, y que estaba encerrado en una prisión sólo para mujeres en Nueva Jersey, ha sido trasladado a otro centro después de dejar embarazadas a dos mujeres a principios de este año.
NJ Advance Media informa que Demi Minor, de 27 años, fue trasladada el mes pasado al Garden State Youth Correctional Facility, una prisión para jóvenes adultos en el condado de Burlington, dijo Dan Sperrazza, un portavoz del Departamento de Correcciones (DOC).
Minor fue trasladado por el DOC a la unidad vulnerable de la instalación. El recluso está cumpliendo una condena de 30 años por homicidio, según el medio.
Durante el traslado a la otra instalación, Minor afirmó que los funcionarios de prisiones le habían golpeado. En un comunicado, el DOC dijo que no podía comentar sobre una investigación en curso.
«El NJDOC no puede comentar sobre ninguna investigación activa», decía el comunicado. «El Departamento tiene tolerancia cero para el abuso, y la seguridad de la población encarcelada y el personal son de importancia crítica».
El traslado de Minor se produjo tras descubrirse el pasado mes de abril que el recluso transgénero había dejado embarazadas a dos mujeres durante «relaciones sexuales consentidas», según NJ Advance Media.
En junio de 2021, Nueva Jersey adoptó una política que obliga a las prisiones estatales a alojar a las personas transgénero de acuerdo con su identidad de género y no con su sexo de nacimiento, según NBC News.
La política se instituyó tras un acuerdo con la Unión Americana de Libertades Civiles de Nueva Jersey después de una demanda presentada por un recluso trans que había sido alojado en prisiones de hombres durante un año y medio. La política expiró el mes pasado después de estar en vigor durante un año. Sperrazza dijo a NJ Advance Media que el DOC sigue operando bajo la política acordada con la ACLU, pero añadió que «el departamento está revisando actualmente la política de alojamiento de las personas trans encarceladas con la intención de implementar pequeñas modificaciones.»
Minor podrá optar a la libertad condicional en 2037, informó el medio.
El Ejército de EE.UU. entrena a los soldados para que se bañen con miembros trans del sexo opuesto
Mientras tanto, en las presentaciones de entrenamiento, el Ejército les dice a los soldados que deben ducharse con transexuales incluso si no se han sometido a una cirugía de cambio de género para la transición a su género preferido.
En un informe exclusivo, Breitbart News dijo que obtuvo una diapositiva de entrenamiento que instruye a los soldados masculinos sobre lo que deben hacer si se encuentran con una mujer soldado que se identifica como hombre de acuerdo con el sistema de seguimiento de personal del Departamento de Defensa conocido como Defense Enrollment Eligibility Reporting System (DEERS).
El medio publicó una diapositiva con una viñeta en la que la mujer soldado tiene «genitales femeninos» pero no se ha sometido a una cirugía de cambio de sexo.
«Viñeta: Tras su transición de mujer a hombre (que no incluyó cirugía de reasignación de sexo) y el cambio de marcador de género en el DEERS, un soldado transgénero comienza a utilizar las instalaciones de cuarteles, baños y duchas de hombres. Como no se sometió a un cambio quirúrgico, el soldado sigue teniendo genitales femeninos».
La diapositiva, según Breitbart, instruye a los soldados: «Los soldados deben aceptar unas condiciones de vida y de trabajo que a menudo son austeras, primitivas y se caracterizan por la escasa o nula privacidad… Entiendan que cualquiera puede encontrarse con individuos en los cuarteles, baños o duchas con características físicas del sexo opuesto a pesar de tener el mismo marcador de género en el DEERS».
La diapositiva de la formación también informa a los soldados de que deben ser «respetuosos con la privacidad y el pudor de los demás», pero que «no se exige ni se espera que los soldados transexuales modifiquen o ajusten su comportamiento por el hecho de no ser ‘iguales’ a otros soldados».
También advierte a los soldados que podrían ser disciplinados bajo el Código Uniforme de Justicia Militar si violan las políticas de igualdad de oportunidades.
Según Breitbart, otras diapositivas de la presentación advierten que las mismas políticas también «se aplican al trabajo, la vida y el entorno recreativo (dentro y fuera del puesto, durante las horas de servicio y fuera de servicio)».
El medio informó de que la diapositiva forma parte de una presentación de formación obligatoria que todos los soldados deben recibir tras la orden de enero de 2021 del gobierno de Biden al Departamento de Defensa de que todas las personas transgénero cualificadas puedan unirse al ejército y servir abiertamente.
Como informó CBN News, cinco días después de jurar su cargo, el presidente Biden firmó la orden ejecutiva que revierte una norma del presidente Trump que prohibía en gran medida que las personas transgénero se unieran al ejército.
El teniente general Tom Spoehr, director del Centro para la Defensa Nacional de Heritage Foundations, dijo entonces que esta política «contribuirá a reducir el nivel de preparación militar de nuestras fuerzas armadas, que ya están presionadas para defender los intereses estadounidenses en todo el mundo.»
«La política anterior fue a menudo descrita de forma inexacta por muchos en la izquierda y en los medios de comunicación. Permitía explícitamente el servicio de personas que se identificaban como transgénero. La política, diseñada por el exsecretario de Defensa James Mattis, excluía, sin embargo, a quienes sufren de disforia de género, una condición médicamente reconocida», explicó Spoehr.
Sostiene que había razones legítimas para las normas militares transgénero del presidente Trump.
«Después de un estudio considerable, la administración anterior encontró que las personas con disforia de género intentan suicidarse a una tasa aproximadamente nueve veces mayor que la de la población general. Los miembros del servicio diagnosticados con disforia de género también tienen nueve veces más probabilidades de tener encuentros de salud mental con un profesional. El servicio militar es inherentemente estresante. La tasa de suicidio en el ejército ya supera la de la población general. Sería inmoral colocar a personas con mayor riesgo de sufrir lesiones mentales -como las que sufren disforia de género- en una situación en la que es probable que experimenten un estrés extraordinario», dijo Spoehr.
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