Un nuevo informe reveló que la persecución cristiana en Cuba ha aumentado a niveles realmente preocupantes, ya que se «duplicaron con creces».
En comparación con el 2021, el 2022 estuvo lleno de violaciones como hostigamiento, detención arbitraria, restricciones de movimiento y viaje, denegación de asistencia a servicios religiosos y reuniones, confiscación de bienes y propiedades, y ataques a las redes sociales, según Christian Solidarity Worldwide (CSW).
Alrededor de 657 infracciones se dieron el año pasado y son descritas por CSW como un «aumento asombroso con respecto al año anterior», además de que sus investigadores se han tenido que exiliar por las continuas amenazas y el acoso de las autoridades.
Un nuevo informe reveló que la persecución cristiana en Cuba ha aumentado a niveles realmente preocupantes, ya que se «duplicaron con creces».
En comparación con el 2021, el 2022 estuvo lleno de violaciones como hostigamiento, detención arbitraria, restricciones de movimiento y viaje, denegación de asistencia a servicios religiosos y reuniones, confiscación de bienes y propiedades, y ataques a las redes sociales, según Christian Solidarity Worldwide (CSW).
Alrededor de 657 infracciones se dieron el año pasado y son descritas por CSW como un «aumento asombroso con respecto al año anterior», además de que sus investigadores se han tenido que exiliar por las continuas amenazas y el acoso de las autoridades.
Todo comenzó el pasado 11 de julio de 2021, cuando se dieron múltiples manifestaciones en el país, afectando a grupos registrados y no registrados de comunidades afrocubanas, judías, musulmanas, protestantes y católicas romanas
Según CSW, la Oficina de Asuntos Religiosos del país es el principal responsable de que las violaciones ocurran cada vez más, ya que mantiene una relación constantemente antagónica con los grupos religiosos, a pesar de la creación del nuevo Departamento de Asistencia a Instituciones Religiosas y Grupos Fraternales del gobierno en marzo de 2022.
Para quienes elaboraron el informe, este es un problema que podría empeorar con la aplicación del nuevo código penal aprobado en diciembre del año pasado, dónde se amplía la manera de reprimir aún más a los líderes religiosos y se aprueba el matrimonio gay.
Asimismo, el informe detalla hay una ola histórica de emigración en la que cientos de miles de cubanos han huido de la isla desde julio de 2021 para buscar refugio en otros lugares.
Por su parte, líderes y defensores de la libertad religiosa han sido arrestados para luego ser liberados bajo amenazas de ser puestos nuevamente tras las rejas, dos de los casos más relevantes son el periodista independiente Yoel Suárez y el líder del Movimiento Apostólico Alain Toledano Valiente.
Países latinoamericanos han expresado su preocupación por este tipo de restricciones que vive el pueblo cubano y sus constantes violaciones de derechos humanos.
Para Anna Lee Stangl, jefa de defensa de CSW, el futuro de Cuba está en manos del pueblo.
“La situación de la libertad de religión o creencias se deterioró una vez más en Cuba en 2022, y sin una intervención internacional significativa, es probable que esta tendencia continúe hasta 2023”, dijo.
“Sin embargo, nos alienta la cantidad de líderes religiosos y defensores de los derechos humanos dentro y fuera de la isla que continúan hablando públicamente sobre la libertad de religión y sus violaciones”, continuó.
“Estamos con ellos e instamos a la comunidad internacional a hacer lo mismo, atendiendo las recomendaciones contenidas en este informe y responsabilizando al Partido Comunista de Cuba por su maltrato a los cubanos y las violaciones cometidas contra las libertades”, concluyó.
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