El año va avanzando y nuestra vida también, es por eso por lo que es importante tomarnos el tiempo para reflexionar en lo que estamos haciendo, y como lo estamos haciendo.
Hay una frase que dice: “Locura es seguir haciendo lo mismo y esperar resultados diferentes” y es una realidad, si seguimos cometiendo los mismos errores del 2022, del 2023, en el 2024 no podemos esperar resultados diferentes, con toda seguridad el resultado será el mismo: Fracaso, frustración y amargura.
Es por eso por lo que hoy vamos a reflexionar en tres palabras muy importantes que nos ayudaran a cambiar nuestro hoy y nuestro mañana con la ayuda del Señor.
Para ya no cometer la locura de hacer lo mismo y esperar resultados distintos necesitamos hacer hoy en nuestra vida tres cosas muy importantes, que las vamos a resumir en TRES PALABRAS:
- PRIMER PALABRA: AUTOEVALUACION (VS 13)
- Como el Apóstol Pablo lo dice en este versículo: No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto…. Es decir que si algo no se ha alcanzado ni algo aun no es perfecto, es porque se puede hacer mejor, se puede hacer más, aun hay cosas por hacer.
- La autoevaluación es evaluar nosotros mismos como esta nuestra vida hoy, es decir no lo que nos dicen los demás o lo que los demás ven, sino evaluarnos nosotros mismos, preguntándonos ¿Estoy satisfecho con lo que he logrado? ¿Estoy conforme por como esta mi vida hoy o podre mejorarla? ¿he hecho todo lo que podría hacer o podría hacer más?
- Auto evaluarnos nos ayuda a tener contentamiento y agradecimiento por lo que Dios nos ha dado hoy, pero nos saca del conformismo, del estancamiento, sabiendo que con la ayuda y el poder de nuestro Dios podemos estar mejor, podemos avanzar más.
- No permitamos el estancamiento en nuestra vida, recordemos que la senda del justo es como la luz de la aurora que va en aumento (Proverbios 4:18)
- No nos acostumbremos a vivir en el fracaso, recordemos que nuestro Dios es un Dios de victoria y esa victoria la comparte con nosotros por medio de Cristo (2 Corintios 2:14)
- SEGUNDA PALABRA: DECISIONES (FILIPENSES 3:13)
- El apóstol Pablo dijo: reconozco que no lo he alcanzado todo aun, reconozco que aun no soy perfecto, reconozco que aun hay mucho por hacer, y tomo una decisión: Olvidare lo que queda atrás y me extenderé a lo que esta delante, no me voy a conformar, no me ve voy a estancar, HOY YO DECIDO AVANZAR.
- Si reconoces que en tu vida hay cosas que mejorar, cosas por alcanzar, metas por cumplir, cambios por realizar, cosas que hay que dejar, tareas que hay que continuar, entonces lo que necesitas primeramente es TOMAR DECISIONES.
- Para transformar nuestra vida tenemos que elegir si queremos seguir viviendo igual o queremos hacer algo para cambiar, todo comienza por una decisión, por un paso de fe, por decidirnos a creer en las promesas de Dios.
- Tenemos que comprender que solo cuando éramos bebes y en nuestra etapa de niñez las circunstancias a nuestro alrededor dictaban lo que sucedía en nuestra vida, no dependía de nosotros, éramos indefensos, no podíamos cambiar nuestra situación, pero en cuando vamos creciendo, cuando nos vamos convirtiendo en adultos ya no son las circunstancias de nuestro alrededor las que dictan como serán las cosas en nuestra vida, sino nuestras elecciones, nuestras propias decisiones, DIOS NOS PEDIRA CUENTAS DE NUESTRAS DECISIONES NO DE NUESTRAS CIRCUNSTANCIAS.
- Piensa y pide sabiduría al Señor para saber que decisiones tienes que tomar HOY en tu vida para transformar lo que estás viviendo.
- TERCER PALABRA: AUTODISCIPLINA (FILIPENSES 3:14)
- Tenemos que comprender que las decisiones por si mismas no transforman la vida, las decisiones son el inicio del cambio, LAS DECISIONES NOS AYUDAN A COMENZAR BIEN, PERO ES LA AUTODISCIPLINA LAS QUE NOS AYUDA A TERMINAR BIEN.
- El Apóstol Pablo dijo: Prosigo a la meta, es decir no solo se trata de decidir avanzar, no solo se trata de decidir cambiar, sino de mantenerlo todos los días, de hacerlo todos los días.
- La autodisciplina es la capacidad para fijar una meta o FORMULAR UN PLAN Y CUMPLIRLO con la ayuda y la fuerza de nuestro Dios, el no quiere que ninguno de nosotros seamos inconstantes en lo que hacemos (Santiago 1:8) Dios quiere que nuestras decisiones sean firmes y que tengamos constancia (1 Corintios 15:58)
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