- Propuesta de reforma parcial a la ley constitutiva de la institución es producto de un amplio diálogo social desarrollado desde el 2018.
- En su construcción participaron representantes gubernamentales y del Poder Legislativo, del sector trabajador, empresarial, académico, estudiantil y de la sociedad civil, así como de organismos nacionales e internacionales.
- Iniciativa, presentada este miércoles a la Asamblea Legislativa por el INA junto a varios diputados y diputadas, promueve cambios normativos que permitirían brindar servicios de manera más ágil y pertinente.
- La transformación del INA adquiere especial relevancia para la reactivación económica, inclusión social, desarrollo productivo y generación de empleo.
Con el objetivo de responder eficaz y oportunamente a los retos y oportunidades que plantea la Cuarta Revolución Industrial, el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), junto a varios diputados y diputadas, presentó este miércoles a la corriente legislativa una reforma parcial a su Ley Orgánica.
La propuesta busca brindarle herramientas y condiciones a la institución para responder ágilmente a las nuevas tendencias del mercado laboral, a partir de las necesidades y potencialidades de las personas, así como de las propias dinámicas de las regiones y territorios del país.
El proyecto incluye reformas al régimen de empleo, otorgamiento de becas, mecanismos de contratación administrativa ágiles, inclusión de empleabilidad y desarrollo empresarial y promoción de la inserción laboral a través de servicios activos para la empleabilidad, así como un modelo de Alta Gerencia Pública y la autorización al INA de crear fideicomisos.
“Potenciar la empleabilidad de las personas para facilitar su acceso y desarrollo al mundo del trabajo, incidir en la competitividad, productividad e innovación del país son aspectos claves integrados en las reformas propuestas”, comentó el presidente ejecutivo del INA, Andrés Valenciano.
Resaltó que la transformación del INA adquiere especial relevancia dado el momento crucial que atraviesa el país en cuanto a reactivación económica, inclusión social, desarrollo productivo y generación de empleo.
La construcción de esta propuesta se generó a través de un profundo proceso de investigación, estudio, análisis y espacios de diálogo social con diversos sectores: gubernamental y legislativo, laboral, empresarial, académico, estudiantil y de la sociedad civil.
En este proceso, se tuvo el acompañamiento de organismos nacionales e internacionales, como el programa EUROsociAL de la Unión Europea, el Banco Interamericano de Desarrollo e instituciones homólogas de Corea del Sur, Singapur y Suiza, y de expertos en temas de formación profesional, empleo, inclusión social, mercados de trabajo, entre otros.
Aspectos fundamentales que contempla la propuesta:
- Reforma del régimen de empleo del INA para que éste se encuentre fuera de Servicio Civil. Se respetarán los derechos y garantías laborales y derechos adquiridos de las personas actualmente contratadas en la institución. El nuevo régimen aplicará para todas las nuevas contrataciones. Esto le dará agilidad y rapidez a la institución para adaptarse a las necesidades de los usuarios y del mercado laboral.
- Otorgamiento de becas. El INA podrá otorgar becas a personas en condiciones de vulnerabilidad para recibir servicios de capacitación y formación en otras instituciones, siempre y cuando estos servicios estén avalados por la institución. Esto impactará de forma pronta y efectiva en las personas que requieren urgentemente de los servicios de capacitación y formación para insertarse en el mercado laboral. Las becas tendrán un tope. Se cumplirán todos los requerimientos de control de la calidad y trazabilidad.
- Mecanismos de contratación administrativa ágiles. Con el fin de brindar más servicios y atender a más personas, el INA tendrá la potestad de crear mecanismos de Contratación Administrativa que sean ágiles y eficientes. Estos se apegarán y respetarán los principios de contratación pública. Es decir, la institución podrá contratar oportunamente para dar servicios pertinentes en cuanto a oferta, cupo, instalaciones, equipamiento y otros.
- Habilitación al INA para crear fideicomisos. Este mecanismo, utilizado por otras instituciones del estado para el desarrollo de obra pública, le permitirá al INA construir de forma ágil y rápida. Asimismo, tendrá la posibilidad de desarrollar mecanismos de aprendizaje-producción, clústeres productivos y otros para el cumplimiento de sus fines, a través de fundaciones.
- Inclusión de empleabilidad y desarrollo empresarial en la finalidad del INA. Se incluyen las atribuciones y funciones de la institución para impactar en la empleabilidad de las personas, y se armoniza su legislación con las últimas reformas que se han hecho en el marco de la Ley del Sistema de Banca para el Desarrollo.
- Inclusión de la promoción de la inserción laboral a través de servicios activos para la empleabilidad.Entre las funciones del INA se adiciona la promoción de la inserción laboral con énfasis en las personas egresadas de los servicios de capacitación y formación profesional del Instituto.
- Transición a un modelo de Alta Gerencia Pública. Atendiendo las mejores prácticas en materia de Administración y las recomendaciones de la OCDE en cuanto a Alta Gerencia Pública, se precisará el rol del Presidente para orientar la estrategia de la institución desde la Junta Directiva. A su vez, la persona que asuma el cargo de Gerente General será la jefatura máxima de la institución. Con ello se da una separación más clara entre las funciones administrativas y político-estratégicas.
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