Grupo evangélico provee 24 toneladas de suministros de ayuda a las víctimas del huracán Beryl

Varias personas visitan un muelle durante la marea alta tras el paso del huracán Beryl en Oistins, cerca de Bridgetown, Barbados, el 1 de julio de 2024. El huracán Beryl provocó vientos devastadores y lluvias torrenciales en varias islas del Caribe el 1 de julio de 2024, cuando la primera tormenta de categoría 4 de la historia se dirigió hacia el oeste. | | CHANDAN KHANNA/AFP vía Getty Images

El huracán Beryl, una tormenta de categoría 3 con vientos de 120 mph, está causando estragos en todo el Caribe, incluidas las Islas Caimán, y ya ha impactado a Jamaica y Granada y provocado al menos 10 muertes. En respuesta, la organización evangélica de ayuda Samaritan’s Purse, con sede en Carolina del Norte, ha transportado por aire más de 24 toneladas de suministros de emergencia y un equipo de especialistas a las regiones afectadas.

El miércoles, Beryl desató sus vientos más intensos a lo largo de la costa sur de Jamaica, mientras que lluvias intensas e implacables y vientos feroces azotaron una región más amplia, informó CNN la madrugada del jueves. Desde las 13 horas del miércoles hasta la 1 a.m. del jueves, Kingston soportó ráfagas de viento cercanas a las 50 mph durante 12 horas seguidas, con ráfagas que superaron las 80 mph al final de la tarde, agregó el canal de cable.

El jueves por la mañana temprano, el huracán Beryl se encontraba a unas 50 millas al suroeste de Gran Caimán y a 385 millas al este-sureste de Tulum, México, informó The Associated Press. El huracán tenía vientos máximos sostenidos de 120 mph y se movía hacia el oeste-noroeste a una velocidad de 20 mph.

A medida que Beryl avanzaba hacia el oeste-noroeste, seguía siendo una amenaza extrema con vientos huracanados que se extendían a 45 millas de su centro.

La madrugada del jueves, Gran Caimán experimentó vientos con ráfagas de más de 50 mph y se prevé una marejada ciclónica de hasta 4 pies. La isla también se enfrentaba a fuertes lluvias, cuyas tasas podrían provocar inundaciones repentinas.

Samaritan’s Purse movilizó rápidamente su Equipo de Respuesta de Asistencia ante Desastres, enviando un DC-8 desde Greensboro, Carolina del Norte, cargado con suministros vitales, incluidas lonas, luces solares, unidades de agua y una unidad médica móvil. El esfuerzo es parte de su misión de brindar ayuda y apoyo inmediatos a las comunidades más afectadas, dijo el grupo en un comunicado a The Christian Post.

«Comenzamos a construir plataformas de carga incluso antes de que el huracán tocara tierra y ahora estamos en camino con ayuda para salvar vidas», dijo Franklin Graham, presidente de Samaritan’s Purse, instando a los creyentes a unirse a él «para orar por las familias que se encuentran en el camino de esta tormenta, y por nuestro personal de Samaritan’s Purse que les estará sirviendo”.

Los esfuerzos de la organización de ayuda evangélica se coordinan con los socios de la iglesia local para garantizar una distribución efectiva de los recursos.

Guy Vital-Herne, gerente de comunicaciones de World Vision, expresó preocupación por regiones como Haití y predijo impactos catastróficos si la tormenta llegara a golpear, dada la vulnerabilidad del país a las inundaciones y los desafíos de infraestructura.

La jefa de promoción de Christian Aid en el Reino Unido, Sophie Powell, llamó la atención sobre las implicaciones más amplias de tales tormentas y enfatizó la necesidad de asignar más fondos para reconstruir en las áreas devastadas por desastres naturales.

«Éstas son las personas que necesitan desesperadamente financiación por pérdidas y daños para ayudarles a reconstruir sus vidas y sus medios de subsistencia», dijo Powell, citado por Relief Web. “No puedes simplemente adaptarte a que un huracán de categoría 5 destruya tu hogar o mate a tu familia. Estas son pérdidas que deben ser compensadas y es por eso que conseguir más financiamiento para el Fondo de Pérdidas y Daños debe ser una prioridad importante”.

A medida que Beryl continúa su camino, las Islas Caimán se preparan para un clima severo continuo con expectativas de lluvias de 4 a 6 pulgadas, lo que exacerba el riesgo de más inundaciones y daños. Mientras tanto, el huracán ya ha causado graves daños en las Islas de Barlovento y se convirtió en una tormenta de categoría 5 cuando azotó Granada, provocando una destrucción generalizada y cortes de energía.

El huracán se había cobrado al menos 10 vidas en toda la región hasta las primeras horas del jueves, y se espera que el número de muertos aumente a medida que continúen los esfuerzos de recuperación.

En Jamaica, la tormenta provocó cortes de energía y daños agrícolas importantes, que afectaron especialmente a los cultivos de plátano y banano.

Las comunidades de todo el Caribe se están recuperando del impacto, mientras el huracán Beryl avanza con fuerza hacia México.

Los meteorólogos predijeron que Beryl tocaría tierra en una región poco poblada de lagunas y manglares al sur de Tulum el viernes temprano, probablemente como una tormenta de categoría 2. Después de cruzar la Península de Yucatán, se esperaba que recuperara fuerza sobre las cálidas aguas del Golfo de México antes de tocar tierra por segunda vez en la costa noreste de México, cerca de la frontera con Texas.

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