Periodistas y representantes de organizaciones periodísticas de América Latina se reunieron en Miami, Florida, en un foro organizado por el Instituto Interamericano para la democracia.
Representantes de organizaciones de periodistas de América Latina pusieron de manifiesto el miércoles la necesidad de velar por la libertad de prensa frente a la grave crisis económica, acentuada por la pandemia, y por los intentos de algunos gobiernos para frenar la distribución de “información independiente y veraz” a toda la población.
El encuentro, organizado por el Instituto Interamericano para la Democracia (IID), contó con la participación de su presidente, Tomás Regalado, que remarcó que hay que “seguir insistiendo en que la prensa es fundamental, es necesaria y que los ataques a una prensa” dificulta el desarrollo de una sociedad “más libre y justa”.
En esa línea, el director ejecutivo del IID, Carlos Sánchez Berzaín, señaló que “tanto los periodistas como los medios deben tener el derecho de investigar sin limitaciones, sin acoso y sin censura”.
“La prensa es poder y donde hay poder hay quecontrolar ese mismo poder, y esa es una de las dificultades que sufre la libertad de prensa”, apuntaba el escritor, sociólogo y politólogo boliviano.
Sánchez Berzaín advirtió que “cuando la libertad está en peligro o es restringida es cuando se está al final de la democracia” y puso como ejemplo los casos de Venezuela y Cuba que, según dijo, se “violentó la libertad de prensa cuando ya tenían controlados los demás poderes”.
El también Catedrático de Derecho Constitucional y de Derecho Internacional Público diferenció “tres clases de prensa”: “Hay una prensa oficial u oficialista que responde a los intereses del gobierno y que es del gobierno. Hay una prensa comercial que vende servicios y que por motivos ideológicos u económicos puede estar alineada a grupos políticos. Y por último está la prensa libre, que se está refugiando en las redes sociales con la amenaza de las fake news (noticias falsas)”.
En su opinión “la oficial y la comercial está muy lejos de la prensa libre” y es por lo que, dice, hay que destinar recursos para preservar la democracia o restablecerla en algunos países de la región.
Por otro lado, Sonia Osorio, presidente y fundadora de la Asociación de Periodistas Venezolanos en el Extranjero, aprovechó su intervención para denunciar “la persecución y el encarcelamiento constante” de periodistas en países como Venezuela, Nicaragua o Cuba.
Nicaragua: la odisea de ser periodista en tiempos de pandemiaEjercer el periodismo en Nicaragua ha sido durante los últimos años un reto enorme, en el que muchos comunicadores han sufrido, en carne propia, las consecuencias de informar algo que al gobierno, liderado Daniel Ortega y Rosario Murillo, presidente y vicepresidenta de la nación centroamericana y esposos, simplemente no les guste.
“En Venezuela ya es una norma que se detenga y se acuse a los periodistas para tenerlos presos en sus casas”, criticaba la periodista.
Es la misma denuncia que hacía Dina Díaz, presidenta de la Asociación de Periodistas Nicaragüenses, que decía que el gobierno de su país sigue “persiguiendo a los periodistas” que ejercen su labor en el país y recordó que “los medios de comunicación continúan en Nicaragua sin poder transmitir en una señal abierta”, por lo que la población debe informarse a través de las redes sociales o de los portales digitales, un reto al que tienen que hacer frente debido al alto coste de los servicios de internet en el país.
Con todo, lamentó que “los periodistas siguen sufriendo en medio de la pandemia” del coronavirus. “Hemos visto la muerte de decenas de periodistas a los que les denegaron la asistencia médica y que han tenido que quedarse en sus casas”.
Ricardo Trotti, director ejecutivo de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), defendió que la situación sanitaria a raíz del coronavirus ha puesto de manifiesto “la revalorización de los medios y del trabajo profesional”, algo que había sido puesto en duda ante la irrupción de las nuevas plataformas tecnológicas.
“Había duda de que internet o las redes sociales habían ocupado el lugar que necesitaban los medios, pero los medios siguen siendo la plataforma donde la gente busca sobre lo que está pasando porque, desde siempre, han gozado de mayor credibilidad”.
Otra cuestión que no ha querido dejar de lado y que, de alguna manera, podría afectar a la libertad de prensa, es el “modelo de negocio de los medios” que, según él, “en muchos casos está agotado”.
“Muchos no han apuntado a la transformación digital, y Google y Facebook -los gigantes cibernéticos- se llevan el ochenta por ciento de la publicidad mundial”, indicó.
Subrayó que “los medios son muy importantes para la democracia, porque son el cuarto poder”, pero insistió en la necesidad “ de pensar en otros modelos de negocio”.
“Se necesitan medios de comunicación pero hay que buscar los modelos de negocio que aseguren la libertad. Creemos que es necesario que haya un estímulo en los medios, no solo de inversión en publicidad, sino que debe haber algún tipo de exoneración de impuestos al consumo de medios”, expresó.
Be the first to comment