Hace unas semanas se celebró un servicio mde avivamiento en la Universidad de Auburn. Cientos de estudiantes se convirtieron al cristianismo. El entrenador en jefe de fútbol, Hugh Freeze, estuvo presente para ayudar a bautizar a los chicos en un lago del campus.
Fue un hermoso momento empañado por un grupo de ateos de fuera de la ciudad. La Freedom from Religion Foundation ahora amenaza con demandar a Auburn. Dicen que es ilegal que los entrenadores bauticen a los estudiantes.
Los ateos también atacaron al presidente del Snead State Community College en Alabama. El presidente daba las gracias durante las comidas y compartía un versículo bíblico guía para el semestre escolar.
Acusaron al presidente Joe Whitmore de “imponer sus creencias religiosas personales a los empleados de Snead State y tratar a Snead State como una universidad cristiana, en lugar de la universidad pública secular que es”.
Exigieron el fin de las oraciones y versículos bíblicos “innecesarios, divisivos e inconstitucionales”.
Pero los ateos de Wisconsin eligieron el estado equivocado para intimidar. Nadie se mete con Jesús en el estado de Alabama.
La gobernadora Kay Ivey, una republicana amante de Jesús, lanzó una respuesta a la Freedom From Religion Foundation.
La gobernadora dijo que los habitantes de Alabama no se dejarán intimidar por grupos de interés de fuera del estado dedicados a destruir la herencia religiosa de nuestra nación.
«Estoy orgullosa de apoyar la libertad religiosa en Snead State Community College y la Universidad de Auburn», escribió en Twitter. «Como gobernador, puedo asegurarles que Alabama nunca se dejará intimidar por grupos de interés de fuera del estado dedicados a destruir la herencia religiosa de nuestra nación».
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